Mi pasión por la costura se convirtió en algo más que una simple afición, cuando tuve a mi hija, por una enfermedad crónica, su crecimiento se vio afectado y al entrar al quinder no encontraba ropa por su tamaño tan pequeño, por lo que  con mis conocimientos basicos de patronaje, le confeccione yo misma sus uniformes, ella se sintio feliz  y eso me hizo sentir satisfecha y me motivo a investigar, a aprender y a perfeccionar mis habilidades para brindarles soluciones a medida a todo aquel que lo requiera.